La Fundación
El día 20 de septiembre de 2017, luego de catorce días de dolorosa agonía, tras haber sido sometida a una cesárea en el nacimiento de su primer hijo, muere Romina por un trombo cardiopulmonar masivo no detectado y erróneamente diagnosticado como crisis de pánico y angustia.
Su médico tratante y los profesionales que se encontraban en el piso, no escucharon, atendieron ni dieron crédito a lo que Romina estaba manifestando y al sufrimiento que estaba padeciendo. Romina murió por negligencia y falta de humanidad.
Para que esta pérdida no sea una más de las tantas que se producen en el país, la familia, con la ayuda de amigos, emprendió la tarea de crear esta fundación para capacitar, acompañar y empoderar de forma integral a madres y padres primerizos de escasos recursos en las etapas de preparto, parto, puerperio y lactancia.
Nos motiva exigir e instalar un trato médico digno, para un parto respetado, basado en la confianza, la comunicación transparente y los derechos de las pacientes, nuestro propósito es que los equipos médicos y de apoyo, tomen conciencia de la responsabilidad que tienen sobre la vida de las personas, y no ocurran más muertes evitables.

Nuestra Misión
Acompañar y capacitar de forma integral a madres y padres primerizos para garantizar la seguridad, el respeto y el trato digno, en un momento tan importante y vulnerable de la vida, como es el periodo que abarcan las fases de preparto, parto, puerperio y lactancia.
Estrategia
Establecemos relaciones vinculantes con:
• Instituciones educacionales y de salud tanto públicas como privadas,
• Otras instituciones gubernamentales,
• Personas comprometidas desde lo humano con este proyecto.
Desde la sociedad civil, queremos que nuestro programa sea complementario y agregue valor al Programa Chile Crece Contigo.
